Con el explosivo auge de las redes sociales, hay quienes creen que las páginas web ya no tienen tanto valor. Sin embargo, lo cierto es que, en muchas ocasiones, se requiere de ambas herramientas para poder implementar una estrategia digital efectiva. Incluso, para determinados sectores y empresas, contar con un sitio sigue siendo mucho más útil e importante que gestionar las redes de manera sostenida y consistente.
¿Cuáles son los beneficios del sitio por sobre las RRSS?
– Brinda mayor profesionalismo y promueve la construcción de una imagen más sólida: mientras que cualquiera puede crear una cuenta en redes sociales de manera rápida y sencilla, las páginas suelen ser elaboradas por personas con mayor conocimiento técnico, y luego de procesos de trabajo más extensos y reflexivos.
– Prácticamente no tiene limitaciones: las redes sociales nos obligan a jugar con sus reglas. Cuentan con estructuras y formas rígidas, limitándonos en diversos aspectos.
Por otro lado, las distintas opciones de lenguajes de programación, posibilitan crear páginas de todo tipo en base a nuestros intereses y objetivos; e incluso integrarlas con otros sitios, plataformas o sistemas.
– Posee menor costo fijo: para poder capitalizar las redes sociales de buena manera, resulta fundamental planificar los contenidos, tener constancia e invertir periódicamente en publicidad. Hacer eso de manera profesional, implica un costo fijo mensual que suele ser excesivamente superior al valor de mantenimiento que tienen la gran mayoría de los sitios web.
– Consigue mayor atención del usuario: dentro de cualquier red social, las personas van saltando de contenido en contenido, sobrevolando de manera superficial las publicaciones y propuestas de millones de cuentas activas.
En cambio, cuando un usuario navega un sitio, tiene toda su atención focalizada en él. Está mucho más cautivo, alejado de los numerosos estímulos y distracciones presentes en las RRSS.
– Podemos controlar de mejor manera su valor: las modas, tendencias y cambios en el funcionamiento de los algoritmos de las distintas redes sociales, hacen que su valor y potencialidad sea cambiante e incontrolable. En contraposición, el posicionamiento de las páginas en los buscadores y el uso que podemos darle a las mismas, es más predecible, estable y controlable por quien las administra.
En conclusión, hay muchos aspectos que hacen que las páginas web sean más útiles y rentables que las redes sociales. Fundamentalmente en los negocios B2B (business to business), en donde no se busca tener un alcance masivo, sino implementar estrategias que permitan una buena construcción de imagen, generando profesionalismo y confianza.
Lo cierto es que las páginas siguen más vigentes que nunca, y habrá que analizar cada caso concreto para sacar conclusiones precisas sobre su potencial uso y valor.
